Puede parecer una mezcla rara si no la conoces, pero ese toque dulce de la zanahoria, hace de esta tarta un postre o merienda delciosa. ¡Pruébala y verás!
Un clásico reconfortante y nutritivo para paliar el frío invierno. Hay que servirla bien caliente y la podemos acompañar de picatostes de pan, fideos o con la propia carne de hacer el caldo.
A partir de 6 meses. Esta rica sopa templada despierta las ganas de comer y reconforta el estómago. Es ideal para servir en la cena; en los mayores de un año podemos añadir queso rallado.
Un plato rico en proteínas y Omega 3 y otras grasas saludables. Se cocina a fuego lento, pero si tenemos prisa, podemos cocer las patatas solas en una olla rápida antes de añadir el pescado. Para bebés a partir de ocho meses.
Los niños disfrutarán mucho con esta receta, ya que les encanta hacer las bolitas de masa y aplastar con las manos. Las perlas de chocolate se pueden encontrar en tiendas gourmet.
A partir de 7 meses. Una receta ideal para las meriendas de verano. La fruta aporta vitaminas y agua y la sémola la energía que necesitan. Es importante añadir a esta papilla un poco de grasa porque, de lo contrario, carecería de calorías y el bebé tendría hambre de nuevo rápidamente.Se puede cambiar la fruta cada vez que se prepare esta papilla. Así el bebé se irá acostumbrando a los diferentes sabores y texturas.
Este milhojas es fácil de preparar, y tus hijos se comerán el pescado encantados. Esta receta es para 4 personas y no tardarás más de una hora en prepararla. A partir de 1 año.
Crema fina, suave y exótica al paladar, que podemos acompañar con un poco de pan crujiente o pita recién horneada. Todo un clásico de la cocina mediterránea.
De vez en cuando se puede tomar un helado de calidad de postre o en la merienda. Pero no conviene abusar de ingredientes ricos en grasas, como la nata.
Las galletas caseras son una auténtica delicia y son muy fáciles de preparar. Con unos ingredientes básicos conseguimos una receta deliciosa. ¿Te apetece?
Estas divertidas galletas serán una apetitosa decoración del árbol de Navidad. Gracias a los caramelos que las decoran quedarán como si tuviesen vidrios de colores. El único problema es que posiblemente no lleguen en el árbol hasta el final de las fiestas… Seguro que los "duendecillos" se las comen antes.
Esta receta es una ensalada fácil y muy original. Es muy nutritiva y energética ya que tiene frutos secos y bacon, ¿qué más se puede pedir? Es una excelente opción para que los niños se inicien en el mundo de las ensaladas.
A partir de 10 meses. El aguacate es un fruto rico en grasas monoinsaturadas, las mismas que tiene el aceite de oliva, muy beneficiosas para la salud. Además, contiene vitamina E, que funciona como antioxidante, y minerales como el hierro, el fósforo o el magnesio.
Un plato rico y saludable, ya que los champiñones contienen vitaminas y minerales, y son pobres en sodio y grasas. Si les añadimos jamón serrano muy picadito, sirve como plato único. Los bebés lo pueden comer a partir de seis meses.
Los buñuelos de viento son un postre clásico el 1 de noviembre. Aunque su receta lleva algo de tiempo, son fáciles de preparar. ¿Quieres saber la receta para aprender a hacerlos?
Una receta ideal para bebés a partir de 6 meses. Este guiso calentito es una opción perfecta para tomarlo como plato único en una comida. A tu peque le encantará.
Aunque no podemos digerirla es un carbohidrato imprescindible. Entre otras cosas modera la absorción de grasas y colesterol, ayuda a controlar el peso… Pero a pesar de los beneficios de la fibra, nuestros hijos consumen poca. Te indicamos qué cantidad necesitan, dónde se encuentra y para qué sirve.
La inflamación del oído, muy común en el invierno por los mocos y en verano por la piscina, provoca dolor intenso y fiebre en niños y bebés. ¿Cuáles son los síntomas? ¿Cómo se trata?
Hay muchos mitos y verdades sobre el posparto circulando por ahí desde tiempos inmemorables. Desmentimos los primeros y explicamos las segundas para que no te pillen por sorpresa después de dar a luz.
No hay que comer más de lo habitual ni privarse de determinados alimentos por dar el pecho. Sólo se debe mantener una dieta sana y equilibrada y no obsesionarse. Estas son las respuestas a las dudas más frecuentes sobre alimentación de la madre y lactancia.
Con el bebé en casa, las noches se acortan y el descanso es menos reparador. Siempre estamos alerta por si el pequeño necesita algo. Por eso es tan importante aprender a relajarnos para conciliar bien el sueño.
Contiene hidratos de carbono, que les aporta energía para jugar y aprender. Además, es uno de los platos favoritos de los más pequeños, no engorda y combina con todos los alimentos. Así que no debe faltar en el menú infantil.