El huevo en la alimentación del bebé genera muchas dudas: cuándo dar huevo, cómo ofrecerlo (cocido, tortilla, frito), si empezar por yema o clara y qué cantidad es segura. Es un auténtico tesoro nutricional (proteínas, hierro, vitaminas A, D, E y B12, colina y grasas saludables) y puede introducirse desde los 6 meses, siguiendo pautas sencillas para hacerlo de forma segura y aprovechar todos sus beneficios.
Te contamos todo lo que debes saber, en base a la evidencia científica y recomendaciones pediátricas en España, sobre la introducción del huevo en la alimentación de tu bebé.
Beneficios del huevo para el bebé
Antes de entrar en detalles sobre cómo introducir el huevo en la alimentación infantil, conviene recalcar por és es importante incluir este alimento en la dieta de los niños y niñas desde la primera infancia. Estos son los beneficios del huevo para el bebé:
- Proteínas de alto valor biológico para crecimiento y desarrollo.
- Vitaminas A, D, E y B12, claves para huesos, defensas y sistema nervioso.
- Minerales: hierro, zinc, fósforo y selenio.
- Colina (en la yema), esencial para el desarrollo cerebral.
- Perfil graso equilibrado (buena proporción de insaturadas).
Importante: la yema concentra gran parte de las vitaminas, minerales y colina. A continuación, te contamos cómo y cuándo empezar a dar huevo a tu bebé.

¿Cuándo empezar a dar huevo al bebé?
Antes se solía pensar que, para evitar la aparición de esa posible alergia al huevo, lo mejor era que un niño no consumiese huevo hasta después de los 10 meses o incluso el año y medio. Hoy en día se ha abandonado esta idea y dados los nutrientes y beneficios que puede aportar a la salud, se ha empezado a introducir con anterioridad.
Estas son las tres reglas de oro para introducir el huevo en los bebés:
- Puede introducirse el huevo a partir de los 6 meses, junto con la alimentación complementaria.
- Retrasar su introducción no reduce el riesgo de alergia y puede incluso aumentarlo.
- Señales de preparación: se mantiene sentado, pierde el reflejo de extrusión y muestra interés por la comida.
Si hay antecedentes familiares de alergia al huevo o dudas concretas, comenta la primera toma con tu pediatra. Es recomendable, no obstante, aislar cada alimento nuevo que des a tu bebé combinándolo solo con otros alimentos que ya haya tomado antes. Así sabrás detectar rápidamente en caso de alergia alimentaria, a qué alimento se debe.

Cómo dar el huevo a los bebés
El huevo en la alimentación del bebé genera muchas dudas: cuándo dar huevo, cómo ofrecerlo (cocido, tortilla, en puré), si empezar por yema o clara y qué cantidad es segura. Es un auténtico tesoro nutricional (proteínas, hierro, vitaminas A, D, E y B12, colina y grasas saludables) y puede introducirse desde los 6 meses, siguiendo pautas sencillas para hacerlo de forma segura y aprovechar todos sus beneficios.
Pero es importante tener en cuenta algunas consideraciones básicas sobre la introducción del huevo en la alimentación infantil antes de detallar cómo empezar a dárselo a los más pequeños.
- No existe una manera predeterminada para incorporar el huevo en la alimentación de los más pequeños. La forma que se elija dependerá de la familia, aunque lo que es importante es que el huevo esté bien cocinado para evitar posibles infecciones como la salmonelosis.
- Se puede introducir de manera larga, como decíamos antes, dándole al bebé la yema separada de la clara durante cuatro días cada una y aumentando sus cantidades poco a poco. La mejor forma de hacerlo es cociendo el huevo.
- También se puede apostar por una introducción corta reduciendo el tiempo a tres días. De esta manera se le ofrece el huevo entero y puede hacerse en forma de tortilla del cocinado.
Dicho esto, proundizamos en si es mejor empezar por la yema o la clara y con qué tipo de recetas es aconsejable introducir el huevo a los bebés, además de las cantidades recomendadas.
¿Yema o clara primero?
El matiz para responder a esta pregunta es si hay riesgo alérgico en el menor o no. En función de ello se recomienda lo siguiente:
- Sin riesgo alérgico: no es necesario separar; puede ofrecerse huevo entero desde el inicio.
- Con riesgo alérgico o historia familiar: puede ser útil empezar por la yema y, más adelante, ofrecer la clara, porque las reacciones se asocian con mayor frecuencia a las proteínas de la clara.
La separación, igual que aislar el huevo con alimentos que ya haya tomado el bebñe, ayuda a observar tolerancias, intolerancias y alergias. Si la reacción es solo a la clara, la yema puede seguir formando parte de la dieta (siempre bajo indicación pediátrica).
¿En puré o entero? BLW y alimentación tradicional
Ambas opciones son válidas si se cumplen los requisitos de seguridad alimentaria. La elección depende del método de alimentación y de la habilidad del bebé.
- En puré: ideal si el bebé sigue una alimentación triturada. Puedes cocer el huevo, pelarlo y triturarlo junto con verduras o legumbres para hacer un potito casero.
- Entero o en trozos: recomendado en BLW (Baby Led Weaning), siempre que los trozos sean grandes y blandos (gajos de huevo cocido o tiras de tortilla cuajada) para que el bebé los pueda coger y chupar.
Cómo dar el huevo a los bebés: tortillas, purés, cocidos...
El huevo debe ofrecerse siempre bien cocinado para disminuir el riesgo de salmonelosis y porque el huevo crudo es más alergénico.
Huevo cocido (opción más segura)
- Cuece al menos 12 minutos desde que el agua hierve.
- En purés: tritura con verduras.
- En BLW: ofrece en gajos/trozos adaptados.
Tortilla francesa bien cuajada
- Cocina a fuego medio y tapada para evitar zonas crudas.
- Corta en tiras para el agarre del bebé (BLW).
Repostería casera al horno
- Bizcochos o galletas caseras bien horneadas (sin huevo crudo).
Formas no recomendadas en menores de 2–3 años
- Huevo crudo o poco hecho: mayonesa casera, merengue, “huevos pasados por agua”, yemas líquidas (p. ej., frito poco cuajado).
- Nota: Mantén el huevo siempre bien cocinado al menos hasta los 2 años; algunos profesionales aconsejan esperar hasta los 3 para poco hechos.
Cantidades recomendadas
Estas son las cantidades recomendadas a la hora de introducir el huevo en la dieta infantil en función de la edad:
- 6–12 meses: 2–3 huevos/semana dentro de una dieta variada.
- Desde 12 meses: hasta 1 huevo al día si el menú global es equilibrado.
El objetivo es incluir el huevo en una dieta varieda. El huevo no debe desplazar otros grupos (verduras, frutas, legumbres, cereales, pescado…) pero tampoco hay riesgo alguno porque el bebé tome uno al día a partir del año, a diferencia que lo se creía antaño.

Guía rápida: paso a paso para introducir el huevo
A modo de resumen y con la intención de facilitar todo lo posible ese momento, a menudo repleto de inseguridad y duda, de introducir el huevo a los bebés, te facilitamos una guía rápida que te ayudará a hacerlo con seguridad.
Paso 1. Elige el momento
Introduce el huevo desde los 6 meses cuando tu bebé muestre señales de preparación.
Paso 2. Primera toma
En bebés sin riesgo: huevo entero y bien cocinado.
Con riesgo: empieza por yema (bien hecha), observa, y pasa a la clara más adelante.
Paso 3. Observa tolerancia
Ofrece cantidades pequeñas al inicio y repite 2–3 días seguidos para vigilar posibles reacciones (ronchas, vómitos, tos, hinchazón, dificultad respiratoria: acude a urgencias).
Paso 4. Consolida
Incluye el huevo 2–3 veces/semana hasta el año y ajusta a partir de los 12 meses según el resto del menú.

Dudas frecuentes sobre la introducción del huevo
Resolvemos, en formato pregunta respuesata, las dudas más frecuentes sobre la introducción del huevo en la dieta infantil.
¿Huevo cocido siempre?
No necesariamente: la tortilla bien cuajada es igual de válida. La clave es que no quede crudo.
¿Puedo dar huevo frito?
Evítalo si la yema queda líquida. En menores de 2–3 años, mejor cocido/horneado o tortilla muy cuajada.
¿Primero un cuarto, luego medio…?
No hacen falta fracciones rígidas. Empieza con pequeñas cantidades y repite 2–3 días para observar tolerancia.
Si hay alergia en la familia, ¿lo retiro?
No necesariamente. Coméntalo con tu pediatra. A veces se empieza por la yema y se valora la clara más tarde.
Resumen clave
En resumen, estas son las consideraciones esenciales a tener en cuenta si vas a introducir el huevo a tu bebé.
- Edad: desde los 6 meses.
- Riesgo: sin riesgo, huevo entero; con riesgo, empezar por yema.
- Cocción: siempre bien hecho (cocido ≥12 min o tortilla cuajada).
- Evitar: huevo crudo/poco hecho, mayonesa casera y yemas líquidas (hasta 2–3 años).
- Cantidad: 2–3/semana (6–12 meses) → hasta 1/día desde 12 meses, con dieta variada.