Hablar de la menstruación sigue siendo, para muchas adolescentes, un tema lleno de silencios y miradas incómodas. Un tema tabú, en definitiva. Aunque se hayan mejorado algunas cuestiones relativas a ello, como el acceso a productos menstruales gratuitos, y aunque existan más espacios femeninos para tratar este tipo de cuestiones cotidianas, la “vergüenza menstrual” —esa mezcla de pudor, tabú y miedo al juicio ajeno— no solo persiste, sino que ha crecido.
Así lo confirma el último informe State of the Period 2025, elaborado por The Harris Poll para PERIOD. y Thinx, Inc.. El documento revela un dato alarmante: casi dos de cada tres adolescentes (62%) consideran que la sociedad les enseña a sentirse avergonzadas por tener la regla, dos puntos más que en 2023.
Esto, inevitablemente, se traduce en gestos cotidianos con relación a la menstruación en edades tempranas que deberían haber quedado en el pasado, olvidados: chicas que esconden una compresa al salir de clase (lo hace el 77%), que callan el dolor para no parecer “dramáticas” (74%), o que evitan pedir ayuda a un profesor o un entrenador cuando el dolor menstrual les impide rendir.
El estudio, basado en las respuestas de más de mil adolescentes de entre 13 y 19 años en Estados Unidos, refleja una tendencia global que debería hacernos reflexionar también en España: hablar de la regla sin miedo sigue siendo una asignatura pendiente.

Qué revela el estudio
Realizado online entre el 21 de julio y el 7 de agosto de 2025, por lo que es muy reciente, el estudio encuestó a 1.014 adolescentes menstruantes de entre 13 y 19 años. Los resultados se ponderaron por edad, región, raza y nivel educativo de los padres.
El informe confirma que, pese a ciertos avances en acceso y educación menstrual, la vergüenza social ligada a la regla está aumentando. Estos son los datos más destacados:
- El 59% de las adolescentes dice sentirse personalmente afectada por el estigma (14 puntos más que en 2023).
- El 77% oculta sus productos menstruales en público.
- El 73% reconoce haber sentido presión por “aguantar” el dolor sin quejarse.
- Y el 37% afirma haber participado en deportes o actividades estando mal solo para no dar explicaciones.
El estigma impacta especialmente a las jóvenes con menos recursos y las personas de piel negra: el 83% de las chicas negras y el 82% de las adolescentes con menos recursos admiten esconder los productos cuando van al baño. Entre las adolescentes hispanas, dos tercios (67%) consideran que la sociedad enseña a tener vergüenza de la menstruación. Cabe recordar, de nuevo, que el estudio se ha desarrollado en Estados Unidos, de ahí que enfatice en determinados colectivos y no otros.

Cómo pueden ayudar madres, padres y educadores
La investigación también deja claro que el hogar sigue siendo el lugar más seguro para hablar de la regla. El 72% de las adolescentes dice sentirse cómoda hablando de menstruación en casa, y en la mayoría de los casos, las madres siguen siendo la fuente principal de información (70%). Sin embargo, los padres ocupan el último lugar: solo el 14% de las chicas acude a ellos con dudas, por detrás incluso de los chatbots de inteligencia artificial (25%).
Esto plantea un reto evidente para las familias: normalizar la conversación sobre la menstruación desde la infancia y tratar de cambiar una tendencia que no se termina de invertir. Hablar con naturalidad sobre el cuerpo, responder sin tabúes a las preguntas y enseñar a los niños, no solo a las niñas, qué es la menstruación, puede reducir ese sentimiento de vergüenza que arrastran muchas adolescentes.
Al hablar sobre salud menstrual con los niños y niñas, los expertos en salud menstrual recomiendan tener en cuenta estos tres detalles:
- Evitar el lenguaje negativo (“sufrir la regla”, “aguantar el dolor”).
- Incluir a padres, profes y entrenadores en la educación menstrual.
- Visibilizar los síntomas físicos sin minimizarlos: aprender a pedir ayuda también es salud.
Todo ello contribuye a lo que los autores de la macroencuesta denominan equidad menstrual (menstrual equity), un movimiento que defiende el acceso universal y gratuito a productos menstruales, y el fin del estigma asociado a la regla.

Aunque el estudio se ha realizado en Estados Unidos, sus conclusiones conectan con la realidad española. Hay datos que lo confirman: según un estudio de Intimina, más de la mitad de las mujeres (52%) no habló con su madre sobre la menstruación hasta que experimentó su primera regla y al 52% de las encuestadas su madre nunca la llevó al ginecólogo.
En este contexto, familias y escuelas tienen el reto de cambiar el relato: educar sin tabúes, escuchar sin prejuicios y enseñar que la menstruación no es algo que esconder, sino una parte natural de la salud femenina.
Referencias
- The Harris Poll on behalf of PERIOD. & Thinx, Inc. State of the Period 2025 Study. Agosto 2025. Disponible aquí.